Lluvia y velocidad, mezcla terrible
Él mismo declaraba que "la culpa fue de la lluvia", Quizás los 580 CV de potencia del muscle-car americano no están pensados para circular bajo lluvia a gran velocidad. Más tarde argumentó: "El conductor era yo, estoy bien, dar las gracias a los chicos de General Motors ya que al parecer el daño fue tan sólo estético, aunque quizás estén tratando de hacerme sentir mejor..."
Como bien dice Aaron Gold, y como se puede ver en la foto, el Camaro sufrió daños en el capó, parachoques delantero y las aletas, prácticamente todo el frontal del deportivo pero por suerte no hay que lamentar daños más graves, materiales o humanos, en lo que quedó como un pequeño susto para el periodista americano.
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