Según varios medios de origen belga, este piloto misterioso de origen desconocido que en su momento el técnico de M-Sport no quisó dar a conocer no sería otro que Robert Kubica. Las únicas menciones al respecto fueron que se trataba de un piloto que tenía considerable experiencia en asfalto y que la prueba fue realizara por propia cuenta del piloto a pesar de no estar seguro de estar listo físicamente para hacer el test.
Las palabras exactas de Loriaux decidó a un medio francés y que han despertado este interés después de las primicias llegadas desde Bélgica fueron las siguientes: "Petter Solberg, Jari-Matti Latvala y un piloto misterioso que no quiere darse publicidad, han estado colaborando en estas pruebas. Es un hombre con algo de experiencia en asfalto y ante el que me quito el sombrero ya que vino por su propia cuenta y trabajó gentilmente. La experiencia fue muy interesante y al principio me dijo que no sabía si, físicamente hablando, podría hacer el trabajo. Finalmente todo salió bien".
Rumores, pruebas y confirmaciones
Parece que Robert Kubica se subió al Fiesta RS motu proprio y pagando los gastos necesarios para participar en este test en el circuito francés de Ecuyers, cerca de Château-Thierry. Con este paso y la más que posible prueba con un Peugeot 207 S2000 del equipo Castelnuovo Scrivia en el próximo mes de octubre, el piloto polaco podría estar intentando abrirse camino en el mundo de los rallies.
La rehabilitación ha provocado un gran progreso en la movilidad de su mano pero parece que la llegada a la Fórmula 1, algo que Eric Boullier dejó caer, es prácticamente imposible. Sin embargo el piloto polaco después de su accidente en el Rallie de Andora con un Skoda Fabia S2000 podría tener su oportunidad en el majestuoso mundo de los rallies.
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