Aún queda mucho campeonato por delante y la pelea por el título del Campeonato del Mundo de Turismos (WTCC) está muy abierta cuando aún quedan cuatro pruebas, que se dividen en ocho carreras, para que veamos coronado al sucesor de 'Pechito' López. El actual líder de la tabla es el portugués Tiago Monteiro, que compitiendo en uno de los Honda Civic del equipo Castrol Honda, siendo escudería oficial del fabricante nipón, ha alcanzado la cifra de 200 puntos hasta este momento, superando a todos empezando por Thed Björk que lo sigue con 188. El luso no se fía de su ventaja y busca aumentarla sí o sí en el siguiente compromiso.
China será la siguiente parada de este campeonato pero no llegará dicho fin de semana hasta el 15 de octubre, hasta entonces los equipos están bien de vacaciones o bien preparándose para esa cita que será tan importante como el resto para la lucha por los títulos en juego. El luso tiene en mente que "no puede fallar en ninguna de las pruebas que quedan" si quiere alzarse con el título mundial de pilotos, mismo caso que en el resto de candidatos, que son hasta siete.Acerca de lo que acontece aún en esta serie, ha asegurado que "pueden salir mal un montón de cosas" en las ocho carreras que hay por disputarse en el actual curso 2017. "Necesitas aprovechar todo lo que ocurra en pista", afirmó el portugués Tiago Monteiro poniendo como ejemplo su mal resultado en Nürburgring Nordschleife, Alemania, y el de Nicky Catsburg en Termas de Río Hondo, Argentina. El pinchazo del Honda Civic número 18 en el mítico Infierno Verde le hizo perder una ventaja importante que aún lamenta.
"Este Mundial de Turismos está tan apretado que todavía hasta siete pilotos pueden ganarlo", añadió el luso que también dijo que "cada punto será importante" sin importar que provenga de MAC3, Q3 o las carreras, por lo que no descarta en ningún caso que Honda adelante a Volvo en la pelea por el título de constructores que para este año tiene únicamente a esas dos marcas como contendientes. Los suecos tienen cierta ventaja pero no deben de bajar la guardia ante un Tiago Monteiro dispuesto a todo en China.
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