Lo primero que hemos descubierto es la gama de propulsores que podrá esconder bajo el capó cuenta con tres motores de gasolina y un motor diesel. En lo que respecta al propulsor diesel, este será el 2.2 SkyActiv-D de 150 CV con un consumo de 3.9 litros a los 100 km en cicli mixto y unas emisiones que superan ligeramente los 100 g/k de CO2. Por su parte, los tres motores de gasolina están bastante encalados para adaptarse a todas las necesidades y van desde el 1.5 SkyActiv-G de 100 CV hasta el 2.0 SkyActiv-G, que en este caso cuenta con potencia de 120 y 165 CV. En todos los casos, el modelo que llegará en octubre a nuestros concesionarios tendrá trasmisión manual de seis velocidades de serie, aunque existe la posibilidad de montar una caja automática de seis relaciones para las motorizaciones más potentes.
Conectividad y seguridad factores clave
El Mazda 3 Sedán incorpora un nuevo concepto de conectividad móvil para la marca donde el smartphone se convierte en un accesorio más con el que interactuar con un automóvil donde se podrá consultar el correo electrónico, los mensajes de texto y las redes sociales. También con este dispositivo y el sistema de conectividad el conductor podrá disfrutar de un actualizado sistema de navegación, una radio en la red con más de 30.000 emisoras y acceso rápido a las redes sociales.
En lo que respecta a la seguridad, destaca el sistema Active Driving Display que proyecto parámetros sobre el parabrisas, el control de crucero adaptativo, el asistente cde cambio de carril o el aviso de obstrucción delantera con control de luces de largo alcance. Todos estos complementos estarán o no incluidos dependiendo del nivel de acabado elegido por el cliente de los tres disponibles. La versión de acceso partirá desde los 17.750 € con el motor 1.5 SkyActiv-G de 100 CV.
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