Al ver las imágenes, cuesta creer que este Phantom 'tuneado' pueda ser, en realidad, un SUV, pero así es. La llegada de un futuro 4x4 a la gama de la firma británica lleva meses confirmada y ahora nos llega la noticia de que ya tiene su versión de pruebas, desarrollándose 'escondido' bajo la carrocería del modelo estrella de la marca: el Phantom.
El futuro SUV: 'a grosso modo'
Que no os engañe su aspecto, ya que la carrocería del Phantom de segunda generación es sólo parte del camuflaje empleado por el chasis y las suspensiones, los primeros aspectos que probarán en esta fase con el objetivo de conseguir que el coche sea lo más confortable y práctico en todas las condiciones posibles. Para ello, se ha modificado y acortado la carrocería original del Phantom para adaptar el nuevo chasis, que tendrá una batalla notablemente más corta, como podemos comprobar en las puertas traseras.
Aunque la marca británica pertenece a la alemana BMW, podremos confiar en que este nuevo SUV tendrá su propio chasis de aluminio y unas suspensiones firmadas por Rolls-Royce, negando la posibilidad de compartir base con el X7 que BMW espera tener preparado en un futuro cercano.
El curioso aspecto de este Rolls-Royce ha hecho que desde la sede de Manchester ya hayan negado los rumores del posible desarrollo de un futuro Rolls-Royce Phantom GT3.