A estas alturas no nos sorprenden y es que el preparador Mansory ya nos tiene acostumbrados a sus excentricidades, haciendo valer el oro como principal elemento de los vehículos más exclusivos y costosos que la compañía produce, coupés de lujo como el Rolls Royce Wraith que en esta ocasión pasa por segunda vez por las manos de los diseñadores de Mansory.
Una vez accedemos al interior, numerosos trozos de oro y piezas del mismo material repartidas por todo el habitáculo, incluido la consola central. Mansory afirma que todas las insignias originales han sido reemplazadas por logotipos y placas terminadas en oro de 24 quilates. Por un pequeño extra en la factura final del deportivo, el preparador puede aplicar este material en prácticamente todas las superficies metálicas del coche, tales como capó, techo o el maletero. Por supuesto, la denominación "999" se refiere a la pureza del oro.
Mecánica y prestaciones
Bajo el capó, el Rolls Royce Wraith monta un poderoso motor V12 Biturbo de 6,6 Litros de cubicaje capaz de superar los 600 CV en la versión Speed. Para la ocasión, Mansory ha realizado cambios en la gestión de la ECU para aumentar la potencia final del "Palm Edición 999" hasta los 730 CV y logrando un incrible par motor de 1.000 Nm, limitado electrónicamente. La caja de cambios es automática, de tipo convertidor de par, con ocho relaciones mientras que la tracción es en el eje posterior.
Mansory no ha confirmado datos de prestaciones aunque si afirma que superará sin problemas la barrera de los 320 Km/h. Además, únicamente se fabricarán un total de nueve unidades, las cuales se suman a las anteriores preparaciones del Wraith y de otros modelos de la compañía como el Ghost, el cual también hace gala de oro en el acabado final de la carrocería.
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