Un empleado de Tata en la India ha creado el mismo un vehículo de conducción autónoma basado en el pequeño Tata Nano, obteniendo así el primer Nano de conducción autónoma y el modelo de estas características más económico hasta la fecha.
La tecnología de conducción autónoma se ha convertido en la última frontera de la automoción. Numerosas marcas de automóviles y distintas compañías se han embarcado en el que parece ser el último gran adelanto que estamos a punto de vivir. Aunque la tarea es ardua y aún está en sus fases iniciales, a pesar de que algunas firmas ya han comenzado a implementar diversas funcionalidades de este tipo en sus vehículos de serie, como es el caso de Tesla Motors con el Autopilot presente en el Model S.En todos esos casos, tanto el de Tesla como el de los diversos proyectos que se encuentran activos actualmente, como el de Google, son auténticos experimentos a gran escala con unos presupuestos inmensos, por lo que la labor de Roshy John con el Tata Nano es aun más llamativa si cabe.
Empezando por el modelo, Roshy escogió el Nano no por su económico precio, sino por que el pequeño modelo indio monta su mecánica en la zona trasera, dejando el frente despejado para instalar y probar la batería de sensores necesarios para el proyecto.
Tal y como se muestra en el vídeo, no solo parece que lo ha conseguido, sino que según informa su creador, el sistema puede ser implementado en cualquier vehículo por un coste bastante inferior al de los proyectos que existen actualmente y que ya llevan gastadas cifras astronómicas en desarrollo de ingeniería, software y los propios vehículos. Desconocemos cuanto se puede haber gastado Roshy en su Nano autónomo, pero desde luego no parece que lleva gastadas docenas de millones de dólares.
Curiosidades
Como curiosidad, el modelo fue probado en las atestadas calles y carreteras de la India, que desde luego no son el mejor entorno para probar uno de estos vehículos, lo que llevó a Roshy a tener que desarrollar y mejorar los propios sensores para elevar su precisión. De la misma manera, el Nano no dispone de transmisión automática, por lo que tuvieron incluso que crear su propio sistema de transmisión manual pilotada, todo un logro para Roshy y su equipo.
Artículos recomendados