El Trabant 601, o como popularmente se le conocía al "Trabi", fue el coche más popular en la Alemania Oriental, y esto quizás se debió a que este coche fue concebido como la respuesta al Volkswagen Beetle de la Alemania Occidental, el cual era considerado como el coche del pueblo; pues el Trabant 601 perseguía el mismo fin, lograr posicionarse como la principal opción de movilidad de la mayoría de los habitantes de la RDA, al ser un coche económico, fiable, fácil de reparar y mantener por sus propietarios.
Se produjeron por más de dos décadas
Su producción se mantuvo activa increíblemente por 28 años a pesar de ser un coche que no contaba con un gran equipamiento, ni mayores comodidades en su interior y esto fue porque seguramente representó la opción más cercana para aquellas personas que vivían en la zona soviética antes de la caída del muro de Berlín. La fabricación de este coche duró por algunos años, de hecho, se fabricación más de 2.8 millones de unidades, una cifra bastante respetable, si tomamos en consideración el tipo de vehículo al cual nos referimos, aunque para la época de su llegada al mercado fue bastante adelantado en muchos aspectos, entre los que vale la pena mencionar la inteligente solución que representó la fabricación de su carrocería hecha con un material plástico compuesto, un motor de bajo mantenimiento, y suspensión independiente en las 4 ruedas.
La producción de este coche finalizó a inicios de la década de los años 90, y aunque ya han transcurrido casi 20 años, la mayoría de las personas que lo recuerdan suelen tener emociones encontradas. En años más recientes hemos podido ser testigos de cómo este pequeño coche ha pasado a ser considerado como un clásico coleccionable, logrando así incrementar nuevamente su popularidad, pero sobre todo sumar nuevos fanáticos a su ya larga lista.
Aún se mantienen
Se sabe que muchos seguidores y fanáticos de este icónico coche en todo el mundo se han dedicado a mantenerlos como nuevos, y esto se ha logrado en colaboración con clubes de propietarios existentes en distintas regiones de toda Europa, y recientemente hemos podido conocer que, gracias al especialista conocido como Vilner Garage, uno de estos ejemplares ha vuelto a sus días de gloria luego de recibir una actualización, tanto en su imagen exterior como interior.
El coche actualizado
El ejemplar que ha recibido dicha actualización por parte del especialista búlgaro se trata de uno de los últimos Trabant que salieron de la fábrica de Zwickau, en Alemania, y cuyo resultado no puede ser considerado menos que increíble, ya que el especialista ha logrado conservar el aspecto clásico del coche y al mismo tiempo darle un toque moderno a su carrocería, gracias al excelente trabajo de pintura que ahora luce en el que se puede apreciar un acabado bitono con el techo imitando un tejido textil. Este mismo patrón de diseño se puede apreciar en las puertas con el numero 21, y en las llantas de chapa, y las ópticas de iluminación principal que ahora cuentan con diodos luminosos.
Dentro del habitáculo
En la parte interior la actualización de este Trabant es mucho más notable, y se puede apreciar casi de manera inmediata en el excelente trabajo de tapicería con el que ahora cuenta luciendo un diseño que combina cuero en dos tonalidades y tela a cuadros, que además se combina perfectamente con el color negro de los paneles laterales y el salpicadero. El acabado que luce el techo del interior del habitáculo es el mismo presente en los asientos, y además mantiene muchos de los elementos originales tales como su equipo de sonido cuadro de instrumentos, palanca, entre otros, sin embargo, se puede apreciar un volante deportivo de tres radios firmado por Momo.
Detalles mecánicos del coche
Bajo el capo encontramos que el motor bicilíndrico de dos tiempos y 500 centímetros cúbicos original ha sido reemplazado por un moderno bloque de 4 cilindros y 1.1 litros, el mismo que podemos encontrar en el Volkswagen Polo de primera generación el cual está asociado a una transmisión manual de 4 velocidades.
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