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ALERTAS DE TRÁFICO

¿Puedes encender un cigarro al volante? La DGT te vigila (y sí, te puede multar)

Aunque la ley no lo prohíbe explícitamente, fumar mientras conduces puede costarte hasta 200€ si el agente considera que supone una distracción.

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¿Puedes encender un cigarro al volante? La DGT te vigila (y sí, te puede multar)

¿Alguna vez te has encendido un cigarro mientras conduces? Si lo has hecho, probablemente no sepas que estás jugándote una multa de hasta 200 euros, aunque no exista una ley que lo prohíba expresamente. La relación entre el tabaco y el volante es más complicada de lo que parece, y muchos conductores desconocen cuándo pueden ser sancionados.

Fumar mientras se conduce en España: el limbo legal

Vayamos al grano: en España no existe una prohibición específica de fumar mientras conduces. Buscarás en vano un artículo del Reglamento General de Circulación (RGC) que diga literalmente "prohibido fumar al volante". De hecho, encender un pitillo convencional o un vapeador mientras llevas el coche no está tipificado como infracción... al menos no por sí mismo.

Pero ojo, esto no significa que tengas vía libre. La DGT lleva años advirtiendo que fumar es una distracción peligrosa. Como me comentaba un guardia civil de Tráfico hace poco: "No multamos por fumar, multamos por la distracción que provoca hacerlo".

La normativa actual obliga al conductor a mantener la total seguridad y atención. El artículo 18.1 del RGC establece que debes mantener en todo momento:

  • La libertad de movimientos
  • El campo de visión necesario
  • La atención permanente a la conducción

Y aquí es donde la cosa se complica. Porque aunque no lo mencione expresamente, cualquier acción que te distraiga o te impida controlar bien el vehículo puede ser sancionada. Y ahí entra el cigarrillo por la puerta grande.

Las multas por fumar al volante: ¿cuándo te la juegas?

La DGT puede sancionarte por fumar, pero solo en situaciones concretas donde considera que está afectando a tu conducción. Los casos más habituales son:

1. Encender o manipular el cigarrillo

Este momento es crítico y lo saben bien en Tráfico. Se tardan unos 4 segundos en encender un cigarro, durante los cuales un coche a 100 km/h recorre más de 100 metros prácticamente "a ciegas". Un agente que te pille en esa situación tiene servida la multa en bandeja.

Como me contaba un conductor multado: "Estaba parado en un semáforo y aproveché para sacar el mechero. Al arrancar seguía intentando encenderlo, y justo pasó una patrulla. 100 euros que me costó el cigarro más caro de mi vida".

2. Cuando el cigarro distrae tu atención o manos

Aunque seas fumador desde los 15 años, conducir con un pitillo significa llevar solo una mano al volante durante varios minutos. A esto súmale dar caladas, sacudir la ceniza o buscar dónde apagarlo... son pequeñas distracciones continuas.

Un policía que te vea demasiado pendiente del cigarro y poco de la carretera podría sancionarte por conducción negligente. Y no, no sirve la excusa de "soy fumador experimentado". La ley no distingue entre novatos y veteranos.

3. Cuando el humo entorpece la visibilidad

Este caso es menos común pero también ocurre. El humo puede nublar ligeramente la visibilidad interior, especialmente en coches pequeños o con poca ventilación. La DGT advierte que los gases del tabaco irritan los ojos y provocan estornudos, afectando tu capacidad de reacción.

Hace unos meses, en una curva cerrada de la A-6, un conductor se salió de la vía porque (según declaró) "una bocanada de humo le hizo entrecerrar los ojos en el momento crítico". Acabó con el coche en la cuneta y una multa por negligencia.

4. Tirar la colilla por la ventanilla

Esta es, sin duda, la infracción más grave y la más perseguida. Arrojar una colilla encendida por la ventana está expresamente prohibido y se considera una infracción muy grave que te costará:

  • 500 euros de multa
  • La retirada de 6 puntos del carné

La sanción se endureció con la última reforma de la Ley de Tráfico debido al riesgo de incendios forestales. Según los datos más recientes, alrededor del 3% de los incendios en España son provocados por colillas arrojadas desde vehículos. Un precio demasiado alto para ahorrarte buscar el cenicero.

¿Infracción leve o grave? Lo que dice realmente la ley

La gravedad de la multa dependerá del criterio del agente que te pille con el cigarro en la boca. En la mayoría de los casos, la sanción aplicada es de 200 euros, lo que corresponde a una infracción grave por conducción negligente (normalmente sin pérdida de puntos).

Si la distracción se considera leve, la multa podría quedarse en unos 100 euros. Por ejemplo, dar una calada rápida en una recta despejada podría verse como una distracción menor.

En cambio, ir fumando mientras circulas por el centro de Madrid en hora punta, o provocar una maniobra brusca por estar pendiente del cigarro... eso ya se considera grave y puede costarte hasta 200€ o incluso la retirada de 3 puntos si realmente pones en peligro la seguridad.

Lo cierto es que el Reglamento General de Circulación no menciona específicamente el tabaco, pero sí recoge en varios artículos la obligación de mantener la atención. El artículo 3 exige conducir con diligencia para evitar cualquier daño, y el 18.1 obliga a mantener la posición adecuada y la atención constante.

Un abogado especialista en tráfico me explicaba: "No hay un tipo específico de 'infracción por fumar conduciendo', pero sí existe la 'infracción por distracción', bajo la cual encaja perfectamente el acto de fumar, igual que otras conductas como manipular la radio o comer un bocadillo al volante".

¿Vapear es diferente a fumar mientras conduces?

Con el auge de los cigarrillos electrónicos, muchos se preguntan si estos dispositivos se tratan de manera distinta. La respuesta es clara: a efectos de seguridad vial, vapear se considera igual de distractorio que fumar.

A efectos prácticos, vapear al volante es exactamente igual que fumar
A efectos prácticos, vapear al volante es exactamente igual que fumar

La DGT aplica exactamente el mismo criterio: si manipular el cigarrillo electrónico te distrae o afecta a la conducción, podrán multarte igual que si fuera tabaco convencional. Las mismas distracciones están presentes: encender el dispositivo, accionar sus botones, inhalar y exhalar vapor...

Incluso la sanción económica sería la misma (100€ si es leve o 200€ si es grave). Y, obviamente, arrojar por la ventana cualquier elemento del vapeador estaría prohibido igual que las colillas.

Un usuario de vapeo me contaba: "Creía que al no tener que encenderlo ni generar ceniza, podía usarlo más tranquilamente en el coche. Un día un agente me hizo parar por ir manejando los botones del vaporizador en marcha. Me recordó que la distracción es la misma, tenga o no llama".

¿Y si viajan niños? La asignatura pendiente

Sorprendentemente para muchos, en España todavía no es ilegal fumar dentro de un vehículo aunque viajen menores o embarazadas. Al tratarse de un espacio privado, la ley antitabaco española no ha extendido la prohibición al interior de los coches.

Esto contrasta con la situación en otros países europeos. Por ejemplo:

  • Francia: Desde 2015 está prohibido fumar en el coche en presencia de menores, con multas de unos 68 euros.
  • Italia: Prohibió en 2016 fumar en el coche cuando van menores de 18 años o embarazadas, con multas que llegan a 650€ en casos graves.
  • Reino Unido: También prohíbe fumar en vehículos con menores (multa de unas 50 libras).

En España, el Gobierno ha planteado varias veces prohibir fumar en el coche cuando viajen niños o embarazadas dentro del Plan Integral de Prevención del Tabaquismo, pero la medida aún no se ha materializado.

La enorme mayoría de la sociedad española (más del 85% según encuestas recientes) apoya esta prohibición por simple sentido común y salud pública. Es más que probable que en los próximos años sí pase a estar prohibido por ley.

Fumar no es la única distracción por la que pueden multarnos
Fumar no es la única distracción por la que pueden multarnos

Un pediatra del Hospital La Paz de Madrid me comentaba hace poco: "El habitáculo de un coche es un espacio cerrado y pequeño donde la concentración de sustancias tóxicas del humo alcanza niveles muy perjudiciales para los niños. Que aún no esté prohibido es un anacronismo que debería solucionarse cuanto antes".

Conclusión: ¿merece la pena el riesgo?

Después de todo lo que hemos visto, la pregunta es clara: ¿compensa arriesgarse a una multa por no esperar a la próxima parada para fumar? La respuesta parece obvia.

Aunque fumar mientras conduces en España es técnicamente legal, te juegas una multa de 100 a 200 euros si distrae tu atención o afecta a la seguridad. Y eso sin contar los 500€ y 6 puntos si tiras la colilla por la ventana.

Como me decía un inspector de la DGT: "La mayoría de los accidentes no ocurren por no saber conducir, sino por distracciones de pocos segundos. Y encender un cigarro requiere justo esos segundos críticos en los que puedes perder el control".

Por tu seguridad, la de tus acompañantes y la de tu bolsillo, lo más sensato es esperar a detener el coche para darte ese capricho. Un cigarro puede esperar, pero un accidente no perdona.