Cada año, millones de conductores españoles reciben esa notificación que nadie quiere ver en el buzón. En 2023, la DGT tramitó más de 5,5 millones de multas, lo que viene a ser unas 15.000 sanciones cada día. Sí, has leído bien: cada día. Y si piensas que a ti nunca te va a tocar, quizá deberías seguir leyendo.
Porque hay cuatro infracciones que se llevan la palma: el exceso de velocidad, usar el móvil al volante, no llevar el cinturón (o las sillitas de los niños) y conducir con alcohol o drogas en el cuerpo. Estas cuatro no solo son las más frecuentes, sino también las más peligrosas. Y por si fuera poco, hay sanciones administrativas que también nos pillan desprevenidos: circular con la ITV caducada, sin seguro o con el carné vencido. Vamos, que las formas de que te multen no escasean precisamente.
Tabla resumen: lo que te cuesta cada metedura de pata
Para que lo veas de un vistazo, aquí tienes un resumen de las infracciones más comunes, lo que te puede costar en euros y los puntos que te quitarán del carnet:
Infracción | Multa | Puntos |
---|---|---|
Exceso de velocidad | 100–600 € | 2–6 puntos |
Uso del móvil al volante | 200 € | 6 puntos |
No llevar cinturón/SRI | 200 € | 4 puntos |
Alcohol o drogas | 500–1.000 € | 4–6 puntos |
Saltarse semáforo o STOP | 200 € | 4 puntos |
Estacionamiento indebido | 80–200 € | 0 puntos* |
ITV caducada | 200–500 € | 0 puntos |
Sin seguro obligatorio | 601–3.005 € | 0 puntos |
No pagar peaje | 100–200 € | 0 puntos |
*Nota: Solo en casos muy graves de obstrucción peligrosa se quitan puntos por mal aparcamiento. En la práctica, la mayoría de multas de estacionamiento son solo económicas.
Exceso de velocidad: la reina indiscutible de las multas
Si hay una infracción que se lleva el trono, es esta. El exceso de velocidad representa entre el 30% y el 40% de todas las multas que se imponen en España. De hecho, en 2022, los más de 1.000 radares repartidos por nuestras carreteras registraron la friolera de 3,5 millones de sanciones. Y es que, según varios estudios, 3 o 4 de cada 10 conductores españoles reconocen que se pasan del límite habitualmente. Vamos, que no somos precisamente unos santos al volante.
La multa por velocidad va desde 100 € hasta 600 €, dependiendo de cuánto te hayas pasado. Por ejemplo, si circulas a 150 km/h en una autopista donde el límite es 120 km/h, te caen 100 € sin pérdida de puntos. Pero si superas los 150 km/h, la cosa se pone seria: 300 € y 2 puntos menos. Y así va subiendo: 400 € con 4 puntos, 500 € con 6 puntos, hasta llegar al tope de 600 € y 6 puntos.
Ojo, porque si te pasas en más de 60 km/h en ciudad o 80 km/h en carretera, ya no hablamos de multa administrativa: eso es delito contra la seguridad vial. En esos casos, además de la sanción máxima, puedes enfrentarte a la pérdida del permiso de conducir de uno a cuatro años e incluso penas de prisión de 3 a 6 meses. Resumiendo: correr de más no solo sale caro, también es peligroso de narices.
Móvil al volante: 200 € y 6 puntos por un WhatsApp
Mirar el móvil mientras conduces se ha convertido en una de las imprudencias más extendidas de los últimos años. Un mensaje rápido, cambiar la canción, consultar el GPS... y de repente, multiplicas por cuatro el riesgo de accidente. La DGT no se anda con chiquitas: desde la reforma de la Ley de Tráfico de 2022, basta con llevar el móvil en la mano (aunque no estés llamando) para que te multen.
La sanción es 200 € y 6 puntos del carnet. Antes eran 3 puntos, pero se duplicaron para que nos lo pensemos dos veces. Y es que ninguna notificación vale la vida. Un segundo mirando la pantalla puede tener consecuencias fatales, así que mejor aparcar o usar un sistema manos libres. Tu bolsillo y tu carnet te lo agradecerán.
Sin cinturón o sillita: 200 € y 4 puntos
Parece mentira que en pleno 2025 todavía haya gente que no se pone el cinturón, pero así es. Ya sea por descuido, por exceso de confianza o porque "solo voy a la vuelta de la esquina", no llevar el cinturón (o no poner a los niños en su sillita homologada) sigue siendo una infracción habitual.
La sanción es clara: 200 € de multa y 4 puntos menos. Y esto aplica tanto a los asientos delanteros como traseros. Si llevas niños, la responsabilidad es siempre del conductor. Más allá del tema económico, el cinturón salva vidas: se estima que ha evitado miles de muertes desde su implantación. Así que ya sabes: abrocharse es lo más barato y sensato que puedes hacer.
Alcohol y drogas: hasta 1.000 € y 6 puntos (o algo peor)
Conducir bebido o drogado es, junto con la velocidad, lo más peligroso que puedes hacer al volante. El alcohol está presente en entre el 30% y el 50% de los accidentes mortales en carretera, según la DGT. Por eso, las sanciones son durísimas.
Si das positivo en un control de alcohol, la multa mínima es de 500 € y 4 puntos. Esto es si superas la tasa permitida (0,25 mg/l en aire espirado) pero sin doblarla. Si te pasas más, la sanción sube a 1.000 € y 6 puntos. Para conductores profesionales o noveles, el límite es más bajo (0,15 mg/l), y si superas 0,60 mg/l ya es delito penal: prisión de 3 a 6 meses, trabajos comunitarios y retirada del carnet hasta 4 años.
Con las drogas no hay margen: tolerancia cero. Cualquier presencia de cannabis, cocaína o lo que sea en tu organismo son automáticamente 1.000 € y 6 puntos. Y negarse a hacer las pruebas es aún peor. En resumen: si bebes o consumes, no conduzcas. Punto.
Semáforo en rojo o STOP: 200 € y 4 puntos
Saltarse un semáforo en rojo o una señal de STOP es de esas cosas que pasan más de lo que debieran. "Daba tiempo", "no venía nadie"... excusas que no valen ante el riesgo de atropellar a un peatón o provocar un accidente.
La multa es de 200 € (reducibles a 100 € por pronto pago) y 4 puntos. Muchos ayuntamientos tienen cámaras de "foto-rojo" que te pillan aunque no haya ningún agente cerca, así que puedes recibir la multa en casa con la foto de tu matrícula. Respeta los semáforos siempre, aunque creas que no viene nadie.
Mal aparcamiento: la multa cotidiana (sin puntos)
Las multas de aparcamiento representan aproximadamente el 10% de todas las sanciones en España. Aparcar en la acera, en doble fila, en plazas de minusválidos o carga y descarga... todo eso tiene su precio.
Las sanciones van desde 80 € por pasarte en la zona azul hasta 200 € si bloqueas el tráfico o un paso de peatones. En teoría, en casos muy graves podrían quitarte puntos, pero en la práctica casi nunca pasa. Eso sí, si además te lleva la grúa, el disgusto es doble. Mejor invertir unos minutos más en buscar un sitio legal que arriesgarse a encontrar el temido papelito en el parabrisas.
Otras infracciones que conviene recordar
ITV caducada
Muchos conductores olvidan pasar la inspección técnica a tiempo. Circular sin la ITV en vigor es infracción grave: 200 € de multa (sin pérdida de puntos). Si la ITV está caducada y te paran, te retiran el permiso de circulación y tienes 10 días para regularizarlo. Si tu coche no pasó la inspección (resultado desfavorable) y aun así circulas, la multa sube a 500 €. No merece la pena arriesgarse.
Sin seguro obligatorio
En España es obligatorio tener un seguro de responsabilidad civil. Circular sin seguro es infracción muy grave con multas que van desde 601 € hasta 3.005 €, según si el coche estaba estacionado o circulando activamente. No se pierden puntos, pero pueden inmovilizar tu vehículo. Y si tienes un accidente, los gastos corren de tu cuenta. Vamos, que no compensa.
Carné caducado
Conducir con el permiso vencido es infracción grave: 200 € (sin pérdida de puntos). Es un despiste común, pero la DGT suele avisar con antelación de la fecha de renovación. Estate pendiente para evitar pagar por un olvido.
No pagar un peaje
Colarse en un peaje es infracción leve: 100 € (hasta 200 € en casos más graves). No quitan puntos, pero tampoco compensa ahorrarse unos euros de manera ilegal. Mejor paga el peaje o busca rutas alternativas gratuitas.
Conclusión: mejor prevenir que llorar
Como dice la DGT, cuando no respetamos las normas de tráfico, nos jugamos algo más valioso que el dinero o los puntos: nos jugamos la vida. Conocer las infracciones más comunes y sus sanciones nos ayuda a ser más conscientes al volante. Así que ya sabes: conduce con prudencia, respeta las normas y ahorrarás multas, puntos y, sobre todo, disgustos. Tu cartera, tu carnet y tu vida te lo agradecerán.