Por ello, el piloto ilerdense ha estado de test en la complicada pista portuguesa desde el pasado lunes y hasta ayer miércoles para testear estas mejoras y preparar la montura para la segunda parte de la temporada. Para el líder de Moto2 es un escenario inédito y aunque el mismo ha reconocido que se parece muy poco a cualquier escenario del Mundial, este test privado junto a Suter le vendrá muy bien para recuperar la confianza en su montura.
Lo cierto es que no ha sido el único piloto en la pista portuguesa ya que Thomas Luthi, uno de sus principales rivales, también estuvo presente a partir del martes en esta prueba. Aun así, centrándonos en la actuación de Márquez, el piloto de Cervera comentaba: "Hemos terminado el primer día de entrenamientos en Portimao y tras muchas horas en la pista nos con buen sabor de boca. Ha sido divertido rodar en este circuito por primera vez, es interesante y el tiempo en el Algarve es bastante bueno para entrenar. Estamos trabajando duro en la puesta a punto, pensando siempre en lo que nos viene por delante, en la segunda parte de la temporada".
Ahora vacaciones
Tras este test, el joven piloto de Moto2 se tomará unos días de vacaciones para llegar preparado a la siguiente cita en Indianápolis. Estos días seguro que son un remanso de paz para estar acompañado por sus seres queridos: "Al terminar el test, luego nos vienen unos días de descanso, que también nos van a venir bien antes de viajar a Estados Unidos, porque tendremos dos Grandes Premios seguidos, primero en Indianápolis y luego en Brno".
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