Para ponernos en situación, hasta la fecha la normativa hacia dos diferenciaciones. El tamaño estándar de los discos de carbono es de 320 mm, siendo las unidades de este tipo de frenos las utilizadas en todos los circuitos salvo en uno. Por sus exigencias técnicas, en Motegi había obligación de montar discos de 340 mm para afrontar las duras frenadas de la pista japonesa. Además, de manera opcional y a elección de los pilotos, en otras dos pitas de frenadas exigentes como Barcelona-Catalunya y Sepang se daba la opción de usar tanto los discos de carbono de 340 mm como la opción principal de 320 mm.
Nuevo planteamiento
A partir de la decisión de la Gran Prix Commission, se replantea la fórmula utilizada. De esta forma, ahora quedan los discos de 340 mm como opcionales en cualquier circuito de la temporada, por lo que los pilotos podrán elegir en cada uno de los 17 Grandes Premios que componen esta temporada si utilizan los discos de carbono de 340 mm o de 320 mm. La salvedad sigue siendo Motegi donde no cambia la obligatoriedad de usar los discos de freno de mayor diámetro para mantener la seguridad de los pilotos en las fuertes frenadas del trazado propiedad de Honda.
Lo que sí está claro, que al final se trata de una cuestión de comodidad y hábitos ya que los discos de 340 mm ni siquiera son necesarios en Montmeló y Sepang, aunque algunos pilotos ya los utilizaban. Todo será probar y adaptarse, pero al menos por el momento no se espera que muchos pilotos opten por discos de freno de 340 mm y más si tenemos en cuenta que hay escenarios por competir poco agresivos con este componente.
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