El Gran Premio de Austria ha llegado a su fin, después de tres días de intensa actividad sobre una pista en la que, durante el día de hoy, Joan Mir ha firmado una gran remontada que le ha llevado desde la vigésima plaza en la que arrancaba la prueba, hasta la octava posición en la que finalmente ha visto la bandera de cuadros.
El piloto del Marc VDS, en tan solo tres vueltas, ha sido capaz de recuperar 13 posiciones y también, unas sensaciones que ha echado en falta a lo largo de unos entrenamientos donde, la lluvia, le ha impedido trabajar y configurar su montura como a él le hubiese gustado.No obstante, esto no ha sido un problema para él una vez ha llegado la hora de la verdad ya que, durante el warmup, el español ha intentado encontrar la mejor puesta a punto para su Kalex, consiguiendo dar un paso hacia delante ya con el asfalto seco.
Sin embargo, a pesar de las mejoras que han encontrado durante el último entrenamiento del fin de semana, al dorsal número 36 le ha faltado ese poco más, que le ha impedido terminar luchando por las primeras posiciones
«Hemos dado un gran paso adelante con la configuración en carrera y recuperado muchas posiciones en las primeras vueltas, pero me ha faltado rebajar una o dos décimas por vuelta", declaraba el piloto del Marc VDS.
La falta de agarre en el tren trasero, ha sido uno de los principales problemas que han lastrado la actuación del balear sobre el asfalto de Spielberg en un fin de semana, del que Mir se marcha lamentándose de no poder haber llegado mejor preparados a una carrera, en la que podría haber aspirado a algo más.
"Me hubiera gustado tener más agarre en el tren trasero pero, con la lluvia que ha caído en estos días, no hemos tenido el tiempo necesario para afinar la puesta a punto para seco; de haberlo tenido, seguro que hubiéramos llegado aún mejor preparados a la carrera", sentenció el español.
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