Consciente de que el camino se hace al andar, Jorge Lorenzo llega con una gran motivación al quinto Gran Premio de la temporada. La caravana mundialista aterriza en Le Mans para seguir con su calendario y, en este nuevo fin de semana, el balear arranca con el mismo objetivo que abandonó Jerez: el de ser competitivo.
En el que está siendo su inicio de temporada más complicado desde que llegase a la categoría reina allá por 2008, el actual piloto de Ducati quiere volver a reencontrar las sensaciones junto a la moto de Borgo Panigale en un trazado, donde ya sabe -y muy bien- lo que es ganar.El choque que tuvo sobre el trazado andaluz con Dani Pedrosa, provocando una caída en la que también se vio involucrado su compañero de equipo Andrea Dovizioso, frustró sus opciones un la que estaba siendo su mejor carrera en lo que va de curso y es por ello, que el español se muestra impaciente por volver a subir a su montura: "Después de lo que pasó en Jerez no puedo esperar para correr en Le Mans".
A pesar de la caída, el balear prefiere quedarse con lo positivo de aquel fin de semana, siendo esto toda la información que recopilaron en pista durante las tres jornadas del Gran Premio: "Como dije después de la carrera, a pesar del choque, creo que la información que recogimos durante el Gran Premio de España fue muy positiva".
El buen trabajo que se siguió desde el box de la fábrica italiana vio sus frutos en la actuación del balear en pista y, a pesar de no haber mostrado el mejor ritmo durante la carrera, Lorenzo fue capaz de liderar e incluso, mantenerse -hasta que llegó la caída- junto a los pilotos más rápidos siendo él, a su vez, uno de ellos.
"Trabajamos bien durante todo el fin de semana y mejoramos nuestra sensación con la Desmosedici GP. En la carrera, aunque no tuve el mejor ritmo, mostré que era uno de los pilotos más rápidos", declaraba el dorsal número 99.
Después del rendimiento que mostró en el trazado andaluz, de cara a esta nueva cita el piloto de Ducati espera continuar en la misma línea y por eso, el objetivo con el que afronta el fin de semana en suelo francés, será el mismo de siempre.
"Por eso, este debería ser nuestro punto de partida en todos los Grandes Premios. El objetivo en Le Mans será el mismo de siempre: ser competitivo desde el primer día y ser capaz de luchar al frente en la carrera", continuaba el español.
Lorenzo, llega impaciente a Le Mans para disputar una carrera que, desde que llegase a la clase reina, ha conseguido agenciarse hasta en cinco ocasiones: "Estoy lleno de energía y ansioso por correr el domingo en un circuito donde he ganado muchas veces en el pasado".
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