Sin lugar a dudas, la temporada 2018 ha marcado un antes y un después en la trayectoria de Luca Marini. El piloto del Sky VR46 Racing Team ha conseguido tres podios y una victoria en este año, yendo de menos a más desde que comenzó en Qatar hasta que se cerró el telón en Valencia. Ahora la era Moto2 se reinicia con los nuevos motores Triumph, y el italiano tendrá más rivales que batir en 2019 si quiere luchar por el título mundial.
Por el momento, ha sido operado de una lesión que ha arrastrado a lo largo de todo el año, pero antes de eso ha tenido la oportunidad de probar el nuevo motor de su moto en los test acogidos en el Circuito de Jerez - Ángel Nieto hace apenas dos semanas: "El hombro me ha fastidiado durante toda la temporada, he tomado analgésicos en cada turno. Sacrificaré el invierno para dedicarme a la rehabilitación, esperando que no tenga ningún problema. Para volver al 100% en forma tendrán que pasar de 5 a 6 meses, pero para pilotar una moto 3 deberán bastar", comentaba."Me gustan muchos cambios, con la Moto2 lo podré hacer bien. Con el motor Triumph tendré que modificar mi estilo de pilotaje, la puesta a punto, el método de trabajo, en mi opinión hay que enfocarlo como si fuera una MotoGP. Ahora se inclina mucho en curva, y es importante levantar la moto rápido en la salida, hacer eso que llaman trick en MotoGP, y también hay más aceleración y una conexión del gas distinta, también los neumáticos tendrán que cambiar: ya he probado el nuevo trasero de Dunlop con un perfil distinto y creo que es un paso adelante, sobre todo por el rendimiento en carrera, pero la moto ahora es menos divertida", admitía el de Urbino sobre los cambios más notables en su moto, que ya ha rodado por debajo del récord de Jerez de su propia mano y de la de Sam Lowes, los dos únicos en bajar del 1'41.890.
En cuanto al mundial del próximo año, se presenta como uno de los pilotos más fuertes de la parrilla tras sus logros en 2018, pero Luca tiene los pies sobre la tierra y se sincera: "Por ahora no siento para nada la presión. Sinceramente, de momento no me siento entre los favoritos porque el año que viene cambiará todo. Quizás un piloto que llega de Moto3, con una moto entera nueva, podría andar fuerte desde el principio, como por ejemplo [Jorge] Martín. En cuanto a los que se han quedado en Moto2, será [Brad] Binder quien irá un paso por delante de todos. Estaremos también nosotros, porque Kalex ha hecho un gran trabajo, somos un gran equipo y no puedo quejarme de nada", afirmaba sobre el nuevo comienzo de la categoría intermedia, que beneficia a algunos pilotos al empezar de cero.
Además de motor nuevo, tendrá un nuevo compañero, será Niccolò Bulega, que tras no cuajar en Moto3 el Sky ha decidido darle una oportunidad y que ocupe el sitio que dejó libre Pecco Bagnaia. "Yo tengo más que enseñar a Niccolò que cuando tenía que hacerlo Pecco para mí, porque Bulega es un debutante. En el primer test ya ha entendido cómo pilotar la Moto2 y ha ido fuerte, espero poder hacer junto a él un buen trabajo como ha pasado con Pecco. Cuando los dos pilotos de un equipo son rápidos, se pueden ayudar más", finalizaba Marini, que ahora llevará el peso grande en el equipo capitaneado por Pablo Nieto.
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