Tras las presentaciones de rigor, el primero en afrontar el reto de tres vueltas a este circuito de tierra era Marc Márquez. Ambas estrellas del motociclismo habían pactado este número de vueltas anotándose cada uno el mejor de sus registros. En el caso del piloto del Repsol Honda en el Mundial de Motocilismo, mejorando sus cronos poco a poco su registro en la última vuelta era de 1:03.64, marca que realmente demostraba que el pequeño gran campeón es muy rápido sobre cualquier superficie.
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Por su parte, Laia Sanz se pasaba a las cuatro ruedas y afrontaba este reto con un Subaru Impreza WRX STi, con tracción total simétrica y un motor bóxer de 360 CV. Un coche de rallies preparado para condiciones de tierra que tiene una aceleración de 0 a 100 en 4,8 segundos. Aunque nosotros ya habíamos desvelado que la fémina iba a utilizar este turismo, para Márquez fue una sorpresa ya que pensaba que Sanz competiría con un Subaru de calle, por lo que las cosas se le ponían más complicadas.
Laia Sanz comenzaba con una fuerza arrolladora y dejando que la trasera de su pesado coche bailase en cada curva se tomó la primera vuelta como fase de adaptación para ir bajando sus tiempos y parar el crono en su última vuelta en 1:02.56, anotándose este particular reto de dos supercampeones con el que hemos podido disfrutar. A nivel personal mientras vemos de nuevo en acción a Marc Márquez en el Gran Premio de Francia y a Laia Sanz, os recomiendo que le echéis un vistazo a este video de Subaru España.
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