Este GP de Argentina será la confirmación de si lo visto en Qatar fue real o un simple espejismo del desierto. Entre estos posibles espejismos se encuentra Valentino Rossi, quien consiguió subirse al podio en Losail tras una apretada carrera, sorprendiendo a propios y extraños al ser capaz de poner un paréntesis en la crisis que vive Yamaha.
El mundial llega a Termas de Río Hondo, circuito que puede ser considerado como el Misano de Sudamérica. Además de ser todo un líder de masas en el país, más amarillo que blanquiazul cuando MotoGP pisa Argentina, el trazado se adapta al italiano como un guante. Así, Vale subió al podio en todas las carreras que se disputaron (3) desde que el circuito entrase a formar parte del calendario de MotoGP (2015), con una primera y dos segundas plazas.La marca de los diapasones tampoco le hace ascos a la próxima cita. Sin ir más lejos, el año pasado consiguieron situar a sus dos pilotos oficiales en el podio y a Zarco en 5ª posición. El circuito, de características contemporáneas y modernas, potencia los clásicos puntos fuertes de la Yamaha, tales como la estabilidad en frenada o el paso por curva. Los japoneses esperan poder conseguir un buen puñado de puntos este fin de semana que les sirvan de balón de oxígeno de cara a las próximas citas, ya que los problemas con la electrónica no están del todo solventados.
La carrera pinta bien para Yamaha y Rossi, quien en sus declaraciones se muestra optimista: "El año pasado fuimos muy fuertes en Argentina. Llegamos primero y segundo y creo que fue la mejor carrera de nuestro equipo esa temporada. Pero desde entonces la parrilla ha cambiado: nuestros rivales ahora son más fuertes. Será una pelea difícil, pero me gusta la pista y generalmente nuestra moto funciona bien allí. Podría ser un fin de semana sorprendente, espero ser fuerte".
Sin embargo, en comparación a otras temporadas, los pilotos y especialmente las monturas están muy igualadas, sin el habitual período de ajuste y rodaje que suelen experimentar Honda y Ducati al inicio de campaña. Teniendo esto en cuenta, los resultados de otros años no son tan determinantes como pudieron serlo en el pasado. Pese a todo, Rossi dará su 100% para estar a la altura de las circunstancias y seguir demostrando que todavía es un piloto competitivo.
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