Nos encontramos en una época donde los avances en el sector automotriz son muchos, las grandes marcas se encuentran invirtiendo gran parte de su tiempo y dinero en estudiar las posibles soluciones en cuanto a la movilidad, es por ello que habitualmente solemos encontrar noticias que hablen de la llegada de nuevas tecnologías. En este caso la reconocida marca Infiniti ha puesto en marcha un nuevo proyecto, con la intención de aplicarlo en su nueva gama de coches con motores de cuatro cilindros. Un motor de combustión interna a gasolina que puede generar excelente rendimiento y prestaciones con un sistema de compresión variable, el cual es capaz de variar su capacidad volumétrica y modificar las relaciones.
¿Que hace especial esta nueva forma de compresión variable?
Observando un poco de historia, se trata de una tecnología que varias marcas intentaron llevar a sus coches de producción en serie, como fue el caso de la desaparecida Saab, la cual pudo lograr fabricar un motor con características parecidas hace aproximadamente 18 años. En épocas más recientes General Motors lo catalogaba de un proyecto poco viable y no llegaría a producción, luego la casa francesa Peugeot lograba presentar un motor 1.5 MCE-5 VCRi.
En detalle la compresión variable
En primer lugar la relación de compresión de un motor tradicional o conocido como ciclo Otto, no es más que el volumen que logra comprimirse entre la mezcla del aire y la gasolina en la cámara de combustión. El punto importante es la incidencia de esta compresión en el desempeño del motor, en cuanto a su rendimiento final una vez que se está conduciendo el coche.
En su momento Mazda ideo una tecnología sin variantes, donde la relación de compresión del motor era alta logrando un mejor desempeño del mismo, eliminando agentes externos, como por ejemplo la sobrealimentación que otorgaban los sistemas de turbo. Las consecuencias para este caso eran eventos inesperados que podían causar averías en los motores, como el caso de las detonaciones por la elevada compresión.
Infiniti comienza el ambicioso proyecto utilizando la teoría del motor ideal, que sería uno capaz de variar la compresión, reduciéndola considerablemente para aprovechar las bondades de un turbo compresor sin causarle daños al motor, y a su vez elevar la relación de compresión luego de lograr una marcha o un andar en carretera con velocidades constantes, para así aprovechar las ventajas del combustible y de este modo reducir las posibilidades de un daño repentino. Todo ello con la finalidad de lograr un nivel de rendimiento alto con un consumo bastante regulado, lo cual se traduce en beneficios para el conductor y el medio ambiente.
En la actualidad infiniti ha recurrido a una solución un poco más sencilla, utilizando un rombo que va a ser el encargado de darle el movimiento del pistón al cigüeñal determinando a su vez la relación de compresión. Multi-Link ha sido el nombre técnico que la marca le ha dado al rombo, el cual a su vez es supervisado por un brazo y un eje de control que se han denominado Harmonic Drive. Este sistema es manejado por un controlador electrónico que será el encargado de darle las posiciones correctas al pistón dependiendo de las necesidades de la conducción y la cantidad de compresión necesaria.
Diferentes marcas se encuentran en este momento realizando estudios para lograr mejorar estas tecnologías y poderlas aplicar en coches de producción en serie, un ejemplo de ello es el caso de Honda, fabricante que tiene suficiente experiencia en la producción de motores altamente eficientes con baja cilindradas, como es el caso de los sistemas i-vetec patentados por la casa Japonesa. La idea de Honda es bastante factible y parecida a la de Infiniti, ya que pretenden lograr una cilindrada variable.
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Variación de la relación de compresión
En los motores de combustión interna que se encuentran comúnmente en el mercado automotriz, el volumen que se comprime dentro del cilindro es constante, inclusive en aquellos que tienen sistemas de variaciones en la apertura y cierre de las válvulas. Para lograr la variación en el volumen de los cilindros se tendría que modificar la posición del pistón, cuando el mismo se encuentre en uno de los puntos muertos, bien sea inferior o superior. Para lograr esto con un pistón que su movimiento es dado por un punto fijo en el cigüeñal, Saab consiguió una técnica que no fue viable, la cual trabajaba mediante un sistema hidráulico que podía variar la posición del pistón gracias a una doble culata con movimiento en su parte superior.
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En la actualidad infiniti ha recurrido a una solución un poco más sencilla, utilizando un rombo que va a ser el encargado de darle el movimiento del pistón al cigüeñal determinando a su vez la relación de compresión. Multi-Link ha sido el nombre técnico que la marca le ha dado al rombo, el cual a su vez es supervisado por un brazo y un eje de control que se han denominado Harmonic Drive. Este sistema es manejado por un controlador electrónico que será el encargado de darle las posiciones correctas al pistón dependiendo de las necesidades de la conducción y la cantidad de compresión necesaria.
Diferentes marcas se encuentran en este momento realizando estudios para lograr mejorar estas tecnologías y poderlas aplicar en coches de producción en serie, un ejemplo de ello es el caso de Honda, fabricante que tiene suficiente experiencia en la producción de motores altamente eficientes con baja cilindradas, como es el caso de los sistemas i-vetec patentados por la casa Japonesa. La idea de Honda es bastante factible y parecida a la de Infiniti, ya que pretenden lograr una cilindrada variable.
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El propósito de Infiniti es presentar una alternativa en motores que puedan tener sus coches en este año 2018, y el momento para ello será el Salón del Automóvil de París donde la marca dará a conocer en detalle esta nueva tecnología, con la cual pretenden ofrecer mejoras de rendimiento y un consumo cercano al de los motores Diesel. El trabajo de Infiniti se viene enfocando desde el año 1998, y es ahora que han conseguido lo que puede ser una solución viable para los motores a gasolina.
Las soluciones y los estudios de muchas marcas se están enfocando en darles una nueva vida a los motores a gasolina que han marcado el mundo durante muchos años. Si bien la mayoría se enfoca en los nuevos coches eléctricos e híbridos, la continuidad de la combustión supone la reducción de una problemática mayor como es la influencia de su desaparición a nivel industrial, con la cual se verían afectados los puestos de trabajo, además de las pequeñas y medianas empresas destinadas a la fabricación de partes para motores convencionales.
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