Para mediados de los años 50 Ferrari preparaba su próxima ofensiva en cuanto a diseño y prestaciones en su extensa gama de vehículos, por esta razón inició el proceso de desarrollo de un nuevo modelo al cual decidieron llamar Ferrari 212 inter, este nuevo modelo llegó para reemplazar a dos de sus más exitosos modelos como lo fueron el Ferrari Inter Tours 166 y el Ferrari Inter Tours 195, fue presentado al público en el Salón del Automóvil de Bruselas de 1951, y es considerado por muchos como una evolución del Ferrari Inter Tours 166 debido a que guarda muchas semejanzas con este modelo.
Los preparadores del coche
Habitualmente Ferrari se apoyaba en diseñadores externos para la culminación de muchos de sus modelos, como lo eran Vignale, Ghia, Ghia-Aigle, Carrozzeria Touring, Stabilimenti Farina, y más recientemente Pinin Farina; el coche en concreto del cual estaremos hablando en este artículo fue carrozado por Ghia, unas de las firmas más prestigiosas de la época y que gozaba de una muy buena reputación gracias a su excelente trabajo en coches deportivos de alta gama.Dónde inició todo
La historia de este coche inicia en el Salón de Paris, en el mes de octubre de 1952 cuando se exponía en el stand de Ferrari junto a otros modelos no menos llamativos y potentes, como por ejemplo, un descapotable con carrocería de Pinin Farina conocido como 0235 EU. A este evento asistió nada más y nada menos que Juan Domingo Perón, quien para el momento era el presidente de Argentina y que poco tiempo después se convertiría en el futuro propietario de este coche.
Perón al pasar por el stand de Ferrari quedó muy interesado en el coche, asi que hizo lo necesario para convertirse en su dueño. Se especula que la negociación se hizo de forma muy discreta y que quizá el motivo de esta fue que el presidente quería evitarse el pago excesivo de impuestos por la compra e importación de un coche nuevo y lujoso pues en esa época era realmente costoso. La compra se efectuó por medio de un intermediario en Roma para posteriormente trasladarlo a Argentina como un coche usado, para esto fue necesario que la fábrica realizara un renumerado del chasis, para que este pudiese adoptar la nueva identidad que había estado en uso de otro Ferrari con carrocería Ghia; la nueva identidad seria chasis 0191 EL, para dicho cambio de numeración no fue necesario el intercambio de ninguna de las partes de los coches como cuerpo, chasis o motores. Fue poco tiempo el que Perón pudo disfrutar de este coche, puesto que al ser derrocado de la presidencia por un golpe militar este debió huir de Argentina, pero fue muy famoso también ya que contaba con una creciente colección de coches además de ser un entusiasta del automovilismo.
Nuevo dueño
A finales de los años 70 el coche pasó a manos de un comerciante que lo vendió en el año 1973 a un italiano residenciado en Buenos Aires de nombre Conrado Tennina, quien fue su propietario durante 14 años. Luego, en el año 1987 fue vendido y pocos años más tarde fue restaurado minuciosamente tanto en su parte mecánica como en su exterior; vale la pena destacar que el trabajo de pintura realizado fue exactamente el mismo con el cual fue presentado en 1952, a saber, una combinación perfecta de amarillo sobre negro, y se cuidó de todos los detalles propios de la época como por ejemplo el juego de neumáticos Whitewall. En 1999 un reconocido coleccionista de coches de feria de Ferrari adquirió el coche, presentándolo en una variedad de importantes eventos, entre ellos, el Cavallino Classic 2001.
Su participación en eventos
En el año 2002 el coche recibió pequeños retoques estéticos y a nivel mecánico. El modelo participó en el Concours d'Elegance de Pebble Beach en agosto de ese mismo año, donde recibió el segundo lugar en su clase; en 2003 nuevamente fue exhibido en el Cavallino Classic donde obtuvo un Premio de Platino y ganó la Copa de la Excelencia. Un mes más tarde este coche fue el tema de la portada de la revista Forza debido a su importancia histórica.
Espera por nuevo dueño
Luego de más de 16 años este 212 Inter se encuentra en venta, por un valor de 1.600.000 dólares, precio que parece razonable al conocer la historia de este bello ejemplar, y su historial de propietarios importantes como lo es Juan Domingo Perón quien fue una de la figuras políticas más destacadas, nombradas y reconocidas de la política latinoamericana, además de ser una unidad única y contar con una carrocería exclusiva de Ghia.
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