La propia firma ha publicado este vídeo, en el que se describe la entrega del ejemplar en Maranello a su propietario, Albert Obrist, importante coleccionista suizo que atesora una increíble colección de modelos de la marca.
Cincuenta y un años
Colección que lleva amasando desde hace más de cincuenta años, cuando compró su primer ejemplar, 250 GT 2+2 de 1962. Actualmente posee rarezas como un 375 MM ganador de de las 24 horas de Spa de 1953, un TR 250 ganador de las u12 Horas de Sebring de 1959 y el 315 S que ganó la última edición de las célebres Mille Miglia, en 1957.
El color en el que ha sido construido el LaFerrari, denominado Grigio Ferro, acentúa las esculturales formas y curvas del modelo, aportándole un toque de elegancia.
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