Estos productos serían fabricados en China, para sus habitantes y a precios tan baratos que sería imposible luchar contra ellos desde fuera. Es decir, lo que Ford pretende es crear una marca "Low cost" para los chinos.
Sin concretar mucho más, el máximo responsable en China de Ford, Dave Shoch, ha confirmado que, una vez esté disponible la planta de fabricación, allí se ensamblará un pequeño nuevo utilitario además de hasta otros ocho modelos que allí serán fabricados.
Y es que Ford confía en que su inversión en el país oriental suponga la mayor expansión de los últimos años gracias a que prevén un crecimiento en las ventas de hasta el 50% gracias a esta nueva estrategia de mercado.
Artículos recomendados