Una gran cantidad de interesantes artículos serán ofrecidos próximamente en el evento que se llevará a cabo por Mecum Auctions Kansas City, y entre ellos encontramos este espectacular vehículo que, aunque ya está próximo a celebrar su 50 aniversario, parece recién salido de la línea de montaje.
Se trata de un Mustang Boss 429 del año 1969 que, a juzgar por su impecable estado, el tiempo parece no haber transcurrido para este clásico; este emblemático coche será subastado próximamente en el Mecum Auctions Kansas City y de seguro se convertirá para los coleccionistas en una pieza muy interesante, no solo por su estado de conservación, sino porque se trata de uno de los coches más importantes de la historia automotriz, un verdadero muscle cars inmortal.
Documentación al día
Hasta el momento se desconoce cuál será el valor estimado de la subasta, pero lo que sí se sabe es que el coche cuenta con toda la documentación necesaria que dan fe de su autenticidad, y que los posibles compradores interesados en participar en dicha subasta tendrán la oportunidad de verificar. Entre los documentos que se podrán apreciar encontramos cosas importantes tales como la hoja de compilación, una carta en la que el fabricante detalla las especificaciones de compilación, una factura de envío de Kar-Kraft, así como también un registro de envío 429. Al parecer este coche solo ha tenido un solo dueño que a juzgar por el kilometraje de su odómetro condujo muy poco este deportivo.
La mecánica del auto
Este Mustang Boss 429 fue vendido por Southeast Ford Sales en Parma Heights, Ohio, en el año 1969. Como se podrá apreciar en su kilometraje este vehículo solo ha recorrido unas 18.000 millas, o lo que es igual a solo 28.968 kilómetros; probablemente por su excelente estado de conservación su dueño quizás lo adquirió para coleccionarlo, y aunque el Boss 429 no es considerado por muchos como el modelo más bonito de Mustang este ejemplar demuestra que puede enamorar a más de uno, y más si tomamos en cuenta su equipamiento, comenzando por su tren motriz que por razones obvias asumimos que es el original, en este caso un motor V8 de 7.0 litros asociado a una transmisión manual de 4 velocidades. Además cuenta con una suspensión de competición y un diferencial Traction-Lock, y un efectivo sistema de frenos de potencia con discos en la parte delantera. Otro detalle que no escapa de nuestra atención es que cuenta con una dirección asistida, algo que mejora las sensaciones al conducir.
Rasgos estéticos
El exterior del coche luce una carrocería impecable en la que se puede apreciar un excelente trabajo de pintura en color Blanco Wimbledon, con unos paragolpes tanto delanteros como traseros cromados que resaltan por no tener ni un detalle; tiene una salida de escapes doble, y unas llamativas llantas cromadas Magnum 500 con neumáticos Goodyear Polyglas.
Detalles internos del coche
La parte interior no se queda atrás, pues su aspecto habla muy bien de la manera en cómo su propietario cuido del coche todos estos años ya que difícilmente se aprecian daños; luce detalles propios de un coche de casi 50 años, entre los que destacan unos asientos de vinilo negro en perfecto estado. Este material se extiende hasta el salpicadero en el que podemos encontrar algunos adornos de madera y un reloj del lado del pasajero o copiloto. Así mismo, combina algunos detalles en metal brillante que hacen perfecto juego con algunos de los componentes cromados del exterior. El volante de madera de tres radios ofrece una visión perfecta al cuadro de instrumentos, en el que funcionan todos sus marcadores.
Con seguridad en dicha subasta abra más de un interesado en llevarse esta belleza a casa, ya que el mercado de los clásicos cuenta con un buen número de seguidores. Habrá que esperar por el precio final y la ubicación del feliz ganador.
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