Según el presidente de AMG la colaboración entre las marcas por ahora no está contemplada, aludiendo al intenso trabajo que tendrá que llevar a cabo la marca deportiva británica adaptando los nuevos motores y su electrónica, además de los propios proyectos abiertos de AMG, como el futuro AMG GT, que estará con nosotros en breve.
Tras estas palabras probablemente se encuentren otros motivos de mayor peso que la propia carga de trabajo de las compañías, como la delicada situación económica de la marca inglesa, que recientemente obtuvo un crédito de unos 120 millones de euros, que se destinarán en principio para reactivar los proyectos abiertos de los últimos años.
Futuro de Lagonda
El primero de ellos y más importante, según la propia Aston Martin, es continuar el desarrollo del modelo SUV de Lagonda, que se encuentra detenido desde su presentación, aparte del profundo cambio de diseño al que declararon iban a someter por la falta de una plataforma viable sobre la que basar el modelo, el primero de estas características en la historia de la marca.
Tenemos, por tanto, el desmentido de los últimos rumores que situaban a ambas compañías ampliando su colaboración para el desarrollo del futuro SUV, concretamente con la plataforma del GL de Mercedes-Benz.
La situación financiera de Aston Martin, aunque no preocupante por el momento, no anima a futuros inversores como la propia Daimler, que como bien comentó Tobias Moers en la misma entrevista, para ampliar dichos acuerdos sería necesaria una mayor inversión en la firma británica, lo cual, hoy por hoy sería impensable para cualquier inversor, ya que la firma de Gaydon se encuentra actualmente con una calificación B3, calidad pobre, por la agencia de calificación crediticia Moody's, con perspectivas negativas para los próximos dos ejercicios fiscales.
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