22 años, media vida compitiendo en el Dakar pero el hambre sigue siendo el mismo que el primer día. Cada año, el reto se renueva para Joan 'Nani' Roma. El susto de la edición 2018 ya es pasado y ahora tanto Roma como Alex Haro solo piensan en ganar el Dakar 2019. Estarán, un año más, con Mini, compartiendo equipo con Sainz, Peterhansel y compañía pero con un vehículo diferente a ellos: el catalán pilotará un Mini 4x4 que, en teoría, parte en desventaja sobre arena respecto a los dos ruedas motrices pero cuya robustez y fiabilidad pueden ser claves en un Dakar tan duro como el que se espera.
Una vida forjada en el Dakar
Se inició en el Dakar allá por 1996, en la categoría de motos. Perserveró, insistió y machacó hasta que consiguió la victoria en 2004. Fue entonces cuando cambió de categoría. Tras nueve ediciones compitiendo sobre dos ruedas, Nani Roma decidió que era el mejor momento para cambiarse a las cuatro ruedas. Y vuelta a empezar. A insistir. A perserverar. A machacar. Otras nueve ediciones le costó ganar el Dakar en coches pero al fin, en 2014, lo consiguió.Pero el bueno de Roma había sido caballo ganador desde el principio, tanto en Mitsubishi, como en Mini. El piloto de Folguerolas era un valor seguro y un compañero de equipo ejemplar. Un hombre de equipo. Desde que en 2012 llegara a la estructura de Mini -ya había formado parte de X-Raid con BMW en 2010-, el hambre y la ambición del piloto español han ido en aumento. Salvo los abandonos de 2015 y 2018, no ha bajado del sexto lugar en la general, logrando además la citada victoria de 2014 y el segundo puesto de 2012. Siempre está ahí, en la lucha, pero le falta rematar. Y eso es lo que quiere hacer en 2019.
En desventaja mecánica pero con mayor fiabilidad
El propio Roma reconoce que tiene el mejor coche que podría tener. Sabe, no es tonto, que los dos ruedas motrices de sus compañeros Sainz, Peterhansel y Despres cuentan con muchas ventajas sobre arena. Pero también sabe que no son tan fiables y robustos como su Mini John Cooper Works 4x4, un coche muy fuerte y también potente después de la mejora de motor que han introducido de cara a la edición 2019 del Dakar. También han mejorado las suspensiones, el reparto de pesos, los neumáticos... todo con la intención de minimizar pérdidas con respecto a los buggies en terreno blando.
Un año de intensa competición
Roma y Haro deberán hacer valer, más que nunca, sus dotes de navegación. Será la clave para poder estar por delante de los 4x2 en el desierto peruano. Además, llegan en forma a la cita estrella del año. Tras el duro accidente de 2018, que tuvo repercusiones físicas en el propio Nani, la pareja española decidió competir en el mayor número de pruebas posibles con la finalidad de recuperar el ritmo perdido y de superar el susto de la mejor manera. Este año han competido y ganado en la Baja Hungría, el Turkmen Rally y la Baja Portalegre, además de un Silk Way Rally en el que no salieron con las mejores sensaciones.
Así pues, Nani Roma se presenta en el Dakar 2019 como principal candidato a la victoria de entre los 4x4, junto con Nasser Al-Attiyah. Llevar el coche hasta el final sin problemas, navegar sin errores e intentar minimizar las pérdidas sobre arena serán las claves para que el piloto catalán pueda llegar victorioso a la meta de Lima, en lo que sería su segunda victoria en la categoría de coches.
Fuente de las fotos: @NaniRoma.
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