En declaraciones a 'AutoHebdo', Jean Claude Vaucard era muy claro: "Propuse cambios que no fueron aceptados, así que propuse mi dimisión un mes después. Un trabajo de consejero funciona si los que reciben los consejos tienen una actitud receptiva. Con Bruno Flamin y el resto del equipo tenemos buena relación, pero Pailler y Le Fur son un muro. Ellos han decidido mantener el esquema inicial con retoques y de esta forma mi papel sobraba".
Deficiencias y rumores
Ya lo hemos comentado en otras ocasiones, pero el buggy de Peugeot Sport nació bajo un concepto equivocado y sin test, llegó al Dakar con lo justo. En primer lugar y en términos generales, el motor del Peugeot 2008 DKR tiene una falta de potencia considerable, algo comprensible si el turbo tampoco funcionó correctamente durante ningún momento en el pasado Dakar. El chasis tuvo que ser soldado a mano en varias ocasiones porque directamente no aguantaba la torsión de un vehículo que ni siquiera tenía unas suspensiones al límite del recorrido marcado por el reglamento. Casi nada.
La política de Peugeot Sport no sólo ha acabado con la paciencia de Jean Claude Vaucard, sino que también tiene muy descontento a Carlos Sainz. El español, como el resto de los pilotos de la marca, pasó una tortura en el Dakar debido al habitáculo minúsculo y normalmente sobre calentado y además está viendo como no se están poniendo soluciones al Peugeot 2008 DKR que el madrileño ve lógicas. A todo este mejunje hay que sumar los rumores de conversaciones entre Nasser Al-Attiyah y Peugeot, información que ha publicado 'l'Equipe'. Casi nada y en Peugeot cuecen habas.
Fuente: AutoHebdo
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