El examen de "chapar y vomitar" tiene los días contados. Seamos sinceros: todos hemos pasado por ahí. Esas tardes interminables memorizando distancias de frenado, metros para adelantar y velocidades máximas que olvidábamos nada más salir del examen. La DGT lo sabe, las autoescuelas lo saben, y hasta tu primo el que suspendió siete veces lo sabe: el sistema actual no funciona.
El formato de siempre -30 preguntas, 30 minutos, máximo 3 fallos- se ha quedado más obsoleto que un casete. Y no es que lo digamos nosotros, es que hasta Pere Navarro, el director de la DGT, ha reconocido que "el proceso de aprendizaje que hoy desgraciadamente hay en los exámenes teóricos, que es sobre todo de memorizar conceptos y normas" debe cambiar urgentemente.
¿Qué demonios es la "percepción del riesgo"?
Vale, suena a jerga de psicólogo, pero es más simple de lo que parece. La percepción del riesgo es básicamente tu sexto sentido al volante. Es esa vocecita que te dice "ojo, que ese niño con el balón puede salir corriendo" o "cuidado, que el del BMW no ha puesto el intermitente y va a cambiar de carril".
La DGT quiere medir esto con vídeos reales de situaciones de tráfico. Nada de dibujitos ni esquemas raros. Vídeos donde "se plantean distintas situaciones de riesgo que el alumno debe de identificar con una serie de preguntas que se le plantean", como ya hacen en Reino Unido desde 2002.
¿Cómo funcionará exactamente?
Imagínate esto: estás en el examen y aparece un vídeo grabado desde el punto de vista del conductor. De repente, ves:
- Un coche aparcado que enciende el intermitente
- Un grupo de niños jugando cerca de la calzada
- Un ciclista que circula por tu carril
- Una pelota que rueda hacia la carretera
Tu misión: identificar cuándo esa situación pasa de ser "normal" a ser un riesgo real. No es clickar como loco (eso te penaliza), sino demostrar que sabes leer la carretera.
Las preguntas multirrespuesta: el terror de los que van "a pillar"
Aquí viene lo bueno. Se acabó el truco de descartar la respuesta absurda. Las nuevas preguntas podrán tener:
- 4 o 5 opciones de respuesta
- 1, 2 o hasta 3 respuestas correctas
- Hasta 6 fallos permitidos (en lugar de 3)
¿Por qué este cambio? Porque la DGT quiere que razones, no que juegues a la lotería. Como dice Enrique Lorca, de la Confederación Nacional de Autoescuelas (CNAE), estas preguntas obligarán a entender "el porqué de las normas", no solo a memorizarlas como un loro.
¿Cuándo llegan estos cambios? (Spoiler: antes de lo que piensas)
La DGT ya está moviendo ficha. "La medida se implantará a comienzos de 2026. Eso será una vez que la DGT consiga acondicionar todos los centros de autoescuela para acometer la instalación de los equipos informáticos necesarios".

Es decir, en cuestión de meses podríamos estar ante el mayor cambio del examen teórico en décadas. Las autoescuelas ya están preparándose: nuevos ordenadores, actualización de temarios, formación para profesores...
Lo que dicen las autoescuelas (y por qué deberías escucharlas)
Sorpresa: las autoescuelas están encantadas. Sí, has leído bien. La CNAE lleva años pidiendo estos cambios porque saben que el sistema actual es pan para hoy y hambre para mañana.
"Lo que se pretende es que el alumno perciba y reconozca esos riesgos", explica Enrique Lorca. La idea es formar conductores, no máquinas de aprobar tests.
Eso sí, también avisan: al principio puede que suspendan más. Normal, es un cambio de chip total. Pero a largo plazo, tendremos conductores más preparados y, esperemos, menos accidentes.
España vs. el mundo: ¿vamos tarde o llegamos justo?
Echemos un vistazo a cómo lo hacen fuera:
País | Formato actual | ¿Incluye vídeos de riesgo? |
---|---|---|
Reino Unido | 50 preguntas + 14 vídeos obligatorios | Sí, desde 2002 |
Países Bajos | 65 preguntas (25 de percepción de riesgo) | Sí, integrado |
Alemania | 30 preguntas con vídeos ocasionales | Parcialmente |
Francia | 40 preguntas tradicionales | No |
España | 30 preguntas tipo test | No (próximamente sí) |
Como ves, no somos los últimos, pero tampoco los primeros. Reino Unido lleva más de 20 años con su Hazard Perception Test, donde los aspirantes ven 14 clips y deben identificar peligros en desarrollo. "You get points for spotting the developing hazards as soon as they start to happen".
El modelo británico: nuestro espejo
Los británicos lo tienen claro: no basta con saber las normas, hay que saber aplicarlas. Su sistema funciona así:
- 14 vídeos de situaciones reales
- Debes hacer clic cuando detectes un peligro en desarrollo
- Puntuación de 0 a 5 según tu rapidez de reacción
- Necesitas 44 de 75 puntos para aprobar
¿El resultado? Conductores noveles que reaccionan casi como veteranos desde el primer día.
Los miedos (comprensibles) de los futuros conductores
"¿Y si ahora es más difícil aprobar?" Es la pregunta del millón. Y sí, probablemente al principio lo sea. Pero pensémoslo de otra forma: ¿prefieres un examen fácil y luego pegarte un susto en la autovía, o un examen que te prepare de verdad?
Además, hay buenas noticias:
- Más fallos permitidos: de 3 a 6 en las nuevas preguntas
- Evaluación más justa: no es memorizar, es entender
- Mejor preparación: las autoescuelas tendrán que enseñar de verdad, no solo trucos
El elefante en la habitación: la inversión necesaria
Todo esto suena genial, pero no es gratis. Las autoescuelas necesitarán:
- Nuevos equipos informáticos capaces de reproducir vídeos
- Actualización completa de temarios y métodos
- Formación para profesores
- Adaptación de las aulas
La DGT está trabajando en ello, pero el proceso llevará tiempo. No esperes estos cambios mañana mismo.
Más allá del examen: otros cambios que vienen
Los vídeos de riesgo son solo la punta del iceberg. Pere Navarro ha dejado caer otras novedades:
- Formación obligatoria sobre alcohol y drogas: no solo saber los límites, sino entender las consecuencias
- Contenidos sobre sistemas de asistencia: ABS, ESP, control de crucero... ¿sabes realmente para qué sirven?
- Módulos de concienciación: sesiones específicas sobre los cuatro jinetes del apocalipsis vial (velocidad, alcohol, distracciones y no usar el cinturón)
- Protección civil: tras la DANA, "la DGT incorporará un módulo específico sobre protección civil en el temario del examen teórico"
La pregunta del millón: ¿funcionará?
Los datos de otros países son esperanzadores. En Reino Unido, "en materia de balance de seguridad vial han sido un éxito". Los conductores que pasan por este tipo de evaluación tienen menos accidentes en su primer año.

Pero seamos realistas: ningún examen hace milagros. Lo importante es el cambio de mentalidad: pasar de "aprobar el examen" a "aprender a conducir de verdad".
Conclusión: un cambio necesario (aunque duela)
Sí, el nuevo examen será más complicado. Sí, probablemente cueste más aprobarlo al principio. Y sí, las autoescuelas tendrán que invertir pasta.
Pero también es verdad que el sistema actual está agotado. No tiene sentido seguir formando conductores que memorizan datos para olvidarlos al día siguiente. Con 1.145 fallecidos en accidentes de tráfico en 2023, no podemos permitirnos el lujo de seguir igual.
El cambio está en marcha. Las autoescuelas se preparan, la DGT afina los detalles, y los futuros conductores... bueno, tendrán que ponerse las pilas. Pero al final del día, todos saldremos ganando: conductores mejor preparados, carreteras más seguras y, con suerte, menos sustos al volante.
¿Estás preparado para el nuevo examen? Porque te guste o no, viene de camino. Y esta vez, no bastará con memorizar: habrá que entender, razonar y, sobre todo, aprender a ver el peligro antes de que sea demasiado tarde.