Lo que parecía ser el renacimiento de una marca por el momento se ha quedado en un mero sueño. El año en Suzuki no ha ido tan bien como ellos se esperaban aunque los resultados son aceptables aunque no excelentes. En la firma de Hamamatsu hacen de tripas corazón, sacando fuerzas como pueden, pero saben que tienen un duro y tortuoso camino por delante. Son diversos los problemas que tienen, conocen sus puntos fuertes. Sin embargo, son diversos los problemas en los que tienen que trabajar.
La firma japonesa dio un paso adelante significativo en la pretemporada. Sabían en que puntos tenían que trabajar y lo hicieron. Presentaron diversas novedades en su montura y los resultados fueron más que positivos, situándose entre las posiciones de cabeza en los test. Entre las diversas novedades que llevaron fue un nuevo carenado, que les permitía controlar el anti-whelie. A todo ello, el nuevo motor, les permitía tener una entrega de potencia que les permitía poder sacar el máximo partido a la GSX-RR.
Los hombres de Suzuki trabajaron en la gestión de neumáticos, uno de sus puntos débiles. Por una parte, comprendieron como tenían que utilizar las gomas para sacarle el máximo rendimiento en las sesiones de clasificación. Además, consiguieron que las sensaciones que tenían ambos pilotos con el tren delantero fueran buenas. De este modo, se solucionaría los problemas que tuvieron el año anterior con esa parte de su montura. Poco a poco fueron recuperando la confianza que perdieron en comparación a años anteriores tras renovar por completo la alineación.
Arrancaba la temporada en Qatar, y los brotes verdes afloraban en el equipo. Los resultados poco a poco fueron mejorando y la confianza en la montura iba en aumento. Su punto álgido fue en el Gran Premio de la República de Argentina. En dicha cita consiguieron su primer podio de la temporada, con Alex Rins finalizando en la tercera plaza. Esta racha se repitió en la prueba que se disputó en el Circuito de las Américas y en la siguiente cita que se celebró en el Circuito de Jerez, siendo Andrea Iannone el que se subiría al podio.
La cita que se disputó en Francia los japoneses no obtuvieron el resultado que esperaban. Sin embargo, recuperaron la senda del podio al quedarse ambas monturas a las puertas del podio en el Gran Premio de Italia. Este resultado solo sería un espejismo, puesto que en la cita de Catalunya no lograron pasar del top 10. Por su parte, regresaron al podio en el Gran Premio de los Paises Bajos, cita en la que lograron el mejor resultado por el momento. No en vano, los japoneses se fueron de vacaciones con un resultado que no esperaban al finalizar solo uno de sus dos pilotos la carrera.
Alex Rins ha tenido una temporada un tanto irregular, pero ha conseguido situarse en la undécima posición con 53 puntos. El español ha recuperado la confianza con su montura, encontrando la forma de sacarle el máximo partido y estar batallando por entrar en la zona de los cinco primeros. Sus números no mienten. De las nueve carreras disputadas se ha tenido que retirar en cinco. En las cuatro restantes, ha finalizado dos en el podio, una en el quinto puesto y otra en la décima plaza. Rins, espera poder cambiar la situación en las próximas citas y comprender como pueden mejorar el rendimiento de la Suzuki en la segunda mitad de temporada.
Por su parte, Andrea Iannone ha conseguido tener un rendimiento mucho más regular, obteniendo la confianza que estaba buscando en la pasada temporada. El italiano va noveno en la general con dos puntos más que su compañero de equipo. Ha finalizado en ocho de las nueve carreras disputadas, con dos terceros puestos como mejor resultado.
En Suzuki tiene bastante trabajo por delante, aunque van por el buen camino. El rendimiento que están consiguiendo es realmente positivo. Los japoneses esperan poder volver al podio en las próximas citas del calendario. De este modo no les importa perder las concesiones que constan de nueve motores por piloto, libre desarrollo del motor durante la temporada, seis wildcards y pruebas ilimitadas. Únicamente necesitan 3 puntos que se consiguen con podios. Les serviría vencer una carrera o dos segundos puestos, aunque también tres terceros.
Si consiguen su objetivo de final de temporada obtendrán un paso importante en su cuarta temporada en la categoría reina desde su regreso. Han vuelto poco a poco y sin hacer ruido, pero los de Hamamatsu están aquí y vienen para quedarse. Han logrado quitarse la espinita del año anterior, desarrollando un motor potente. Faltará por ver cuál es el siguiente paso.
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