Xavi Forés afronta motivado este fin de semana en Francia la decimoprimera cita de la temporada. El piloto de Llombai llega al trazado galo séptimo de la clasificación general con 170 puntos, 48 por encima de Eugene Laverty y 34 por debajo del británico Álex Lowes.
En el último Gran Premio en el Autónomo de Algarve en Portimao, Xavi no tuvo un buen fin de semana. No partía mal en parrilla, 7º, pero en carrera no pudo ni completar la primera vuelta tras una caída con Laverty. En la segunda carrera el domingo, las cosas no fueron mucho mejor, finalizando 10º a casi 20 segundo del ganador Jonathan Rea.Fue así uno de sus peores carreras desde que llegó al mundial de Superbike, pero el #12 solo piensa en volver a los grandes resultados logrados a principios de temporada, donde llegó a conseguir tres podios, en Phillip Island, Buriram y Motorland Aragón. La clasificación de mejor independiente lo tiene casi asegurada, aventajando en 62 puntos al turco Toprak Razgatlioglu.
"Magny-Cours es una pista que me gusta y donde siempre he sido rápido. El año pasado obtuve un cuarto puesto en la segunda carrera, pero luché hasta el final por las posiciones de podio. Espero tener un fin de semana tranquilo para poder trabajar mi ritmo de carrera y preparar lo mejor posible las dos carreras", declara Xavi.
Sus resultados de aquí al final de temporada serán muy importantes de cara al año que viene, ya que su Ducati está amenazada por un joven piloto italiano con mucho talento, Micahel Rinaldi. Ya el año pasado sonó esa opción, pero en el Barni Racing decidieron seguir con el español. Su temporada está siendo lo suficientemente buena como para continuar, pero todo puede pasar.
Tras tener una posibilidad de encontrar hueco en el equipo oficial en 2019 junto a Chaz Davies, esa opción se cerró al fichar a Álvaro Bautista, y ahora tampoco su presencia en su actual equipo es segura. La mejor forma de renovar, es con resultados y Magny-Cours en un buen circuito en el que le gusta y se le da bien.
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