El potencia del campeonato es grande y eso es algo que sabe Dietrich Mateschitz, por lo que está dispuesto a aprovecharlo. Ahora es el turno de asentarse y de adquirir los derechos de promoción y comunicación a nivel mundial por un periodo de largo tiempo, pero este multimillonario con olfato para los negocios ha sido claro: "Es verdad que creemos que el potencial del WRC es más grande de lo que ha parecido en los medios de comunicación en los últimos años y por ello vamos a tratar de descubrir su verdadero potencial para aprovecharlo. Sólo el tiempo dirá que se ve desde fuera y el éxito de nuestros esfuerzos".
De hecho, la delicada situación que ahora mismo tienen M-Sport o Prodrive por la marcha del apoyo de sus respectivas marcas, parece que no hace mermar este potencial e incluso no incomoda al jefe de Red Bull: "Es cierto que existen algunas incertidumbres relativas a los equipos del WRC, con la salida de Ford, pero creo que no hay mucha diferencia si los equipos se suministran de fábrica o de apoyo privado porque lo importante es que los equipos y pilotos hagan un buen papel, sean competitivos y ofrezcan buen espectáculo".
Presente y no pasado
Lo que más ha llamado la atención de esta primera intervención con respecto al Mundial de Rallies de Mateschitz es su idea de que no hace falta volver al pasado con rallies de mayor resistencia para ver un buen espectáculo, algo que sin duda choca con los pensamientos de la FIA: "No creo que tenga sentido revivir el pasado, la conducción en los rallies no debe ser más peligrosa de lo que ya es y por lo tanto no veo razones para tocar el modelo actual".
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