Tal y como muestra el artículo 64.5.1 del reglamento deportivo del WRC, cada fabricante debe elegir una serie de vehículos destinados a funcionar con la misma transmisión y piezas de repuesto, algo que se hace en packs de tres pruebas. En el caso de Jari-Matti Latvala, el Rally de Suecia quedaba vinculado con México y Argentina, lo que supondría todo un reto para la mecánica del Volkswagen Polo R WRC 2015. Por ello y tras terminar 12º y no sumar puntos en el Power Stage, Volkswagen decidió 'aparcar' el coche de Latvala antes del control de tiempos final para tener mayor libertad en este aspecto.
Ser práctico
Con esta maniobra, el equipo podrá cambiar algunos de los componentes mecánicos del vehículo de Jari-Matti Latvala antes de poner el coche en competición. Una decisión lógica que contrasta sin duda con lo sucedido en mitad del rally. De haber sido todavía legales los splits y las informaciones entre el equipo y los pilotos, posiblemente la primera salida de pista de Latvala no se hubiera producido. Da la casualidad que el finlandés cometió el error después del trompo realizado por Ogier. Seguramente de haberlo sabido, no habría apretado tanto en la zona donde tuvo el accidente.
En cualquier caso, Jari-Matti Latvala aprovechó el Rally de Suecia para probar distintas configuraciones y soluciones en su Polo R WRC: "Una vez cometido el error del viernes, no iba a jugarme nada en el resto de la prueba. Esto me dio tiempo para probar algunos cambios con el set-up y pude aprender cosas importantes. Ahora entiendo el nuevo Polo mucho mejor y ello se ha reflejado en el día de hoy. La temporada es todavía joven. Mi posición de salida será una ventaja en México y voy a atacar de nuevo allí".
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