Sin embargo, lo que queda claro es que Robert Kubica está bajo la influencia de un Malcolm Wilson que ha conseguido una vez más reorganizar M-Sport de una manera muy provechosa. El directivo, con sus defectos y sus virtudes, puede estar orgulloso de lo que ha conseguido y como es lógico sólo tiene elogios y buenas palabras para el piloto polaco: "Estoy encantado de que Robert Kubica afronte la próxima temporada con un Ford Fiesta. Desde que irrumpió en el Mundial de Rallies a principios de este año hemos estado muy interesados en contar con él y creo que podemos esperar grandes cosas en 2014".
Reto para ambas partes
M-Sport ha tenido que pedir permiso a la FIA para homologar una versión del Ford Fiesta RS WRC con un cambio adaptado para los problemas físicos que arrastra Robert Kubica tras su fatal accidente, lo que ha sido un reto técnico para los ingenieros del preparador británico, que no sólo ha tenido que conseguir una adaptación a las necesidades del polaco, sino que también se ha visto en la obligación de "igualar" rendimiento respecto a los cambios habituales que hay presentes en otros Fiesta RS WRC y en el resto de World Rally Car.
Sea como fuera, Malcolm Wilson va un poco más lejos y ve a Robert Kubica como un piloto de esos que desprenden un aroma especial: "Sólo hay que ver la forma en que Robert Kubica preparó la temporada pasada para ver lo que significa para él. Tiene un deseo y un hambre que no se ve en muchos pilotos y realmente creo que M-Sport le puede ofrecer todas las herramientas adecuadas para avanzar en los rallies".
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